El éxito del sector porcino no depende de una sola figura, sino de la colaboración entre todos los profesionales implicados.
En el sector porcino, cada profesional tiene un papel fundamental para garantizar la salud animal, la sostenibilidad y la rentabilidad de las granjas. Ingenieros, veterinarios, ganaderos y otros gremios deben trabajar juntos, respetando sus campos de especialización y con un objetivo común: lograr un sector más eficiente, sostenible y preparado para los retos del futuro.
Sin embargo, la labor de los ingenieros, esenciales en el diseño y optimización de las instalaciones, muchas veces pasa desapercibida. Su contribución es clave para garantizar que el manejo y la producción se desarrollen en condiciones óptimas.
El objetivo de este artículo no es otro que destacar la importancia de trabajar unidos y la complementariedad de dos profesiones tan fundamentales para el sector porcino como son la ingeniería y la veterinaria.
Ingeniería aplicada al sector porcino: la base para el bienestar animal y la productividad
Los ingenieros especializados en el sector porcino desempeñan un papel que va mucho más allá del diseño de las instalaciones.
Sus competencias incluyen:
1 | Diseño de instalaciones funcionales y sostenibles
Los ingenieros trabajan para crear granjas que favorezcan el bienestar animal, con espacios adaptados que optimicen la producción y reduzcan el impacto ambiental. Esto incluye sistemas de ventilación, filtrado de aire y control ambiental para mantener condiciones óptimas en el interior de las granjas. Por ejemplo, el diseño de granjas con ventilación mecánica puede reducir la concentración de gases nocivos y mejorar la calidad del aire, lo cual contribuye a la salud animal y a la sostenibilidad de las operaciones.
2 | Eficiencia energética
Uno de los grandes retos actuales es el consumo de energía y los ingenieros implementan soluciones de eficiencia energética como el uso de energías renovables, sistemas de puritermia, mejoras en el aislamiento para reducir los costes energéticos y la huella de carbono, así como la instalación de sistemas de alimentación de precisión que también controlan, de forma individualizada, la temperatura de la placa de calefacción, del foco y el consumo de agua.
3 | Planificación y ejecución de obras
Desde la construcción de nuevas granjas hasta reformas o ampliaciones, los ingenieros supervisan que todo cumpla con las normativas vigentes y que se respeten los principios de funcionalidad y sostenibilidad.
4 | Asistencia técnica y posventa
Asegurar que las instalaciones funcionen correctamente es tan importante como diseñarlas. Los ingenieros ofrecen servicios de mantenimiento, puesta en marcha de equipos y resolución de incidencias técnicas para garantizar la continuidad del trabajo diario.
El diseño de las instalaciones afecta directamente a la salud de los animales y, en consecuencia, a su productividad. Por ejemplo:
- Una ventilación adecuada reduce la concentración de gases nocivos como el amoníaco, mejorando la calidad del aire y disminuyendo la incidencia de enfermedades respiratorias.
- Un buen manejo térmico reduce el estrés por calor o frío, lo que impacta positivamente en el bienestar animal y en los índices de conversión.
Además, la ganadería de precisión, una tendencia en auge, también juega un papel importante. Según este artículo publicado en porciNews, el uso de tecnologías avanzadas para la monitorización individual de los animales permite optimizar el manejo y mejorar la eficiencia en la producción. Los ingenieros son fundamentales en la implementación de estas tecnologías, integrándolas en las instalaciones para maximizar su efectividad. Dos ejemplos son los sensores de temperatura y humedad conectados a sistemas automatizados que garantizan un ambiente óptimo para los animales en tiempo real, así como sistemas de alimentación de precisión que permite controlar la ingesta de pienso de una forma individualizada.
Por otro lado, el uso de sistemas innovadores, como la puritermia, permite aprovechar los recursos internos de la granja para generar energía, lo que no solo mejora la sostenibilidad, sino también reduce costes operativos.
Mujeres ingenieras que rompen moldes
El papel de las mujeres en el ámbito de la ingeniería está cobrando cada vez más relevancia en sectores tradicionalmente dominados por hombres. Las mujeres ingenieras aportan una perspectiva única, combinando innovación, análisis detallado y habilidades de gestión que enriquecen los proyectos en los que participan.
Desde el diseño de instalaciones hasta la implementación de tecnologías avanzadas, las mujeres están liderando iniciativas clave que transforman el sector. Además, su presencia refuerza la importancia de la diversidad en equipos multidisciplinarios, demostrando que una visión inclusiva conlleva mejores soluciones y resultados más sostenibles.
A medida que se fomenta la igualdad de oportunidades y se rompen barreras, el impacto de las mujeres ingenieras en el sector porcino continúa creciendo, consolidándolas como piezas fundamentales en el desarrollo de una industria más innovadora y equitativa.
Construyendo juntos el futuro del sector porcino
En ocasiones, se percibe cierta rivalidad entre ingenieros y veterinarios en el sector porcino. Sin embargo, lejos de ser contrarios, ambos perfiles son complementarios y necesarios.
Mientras los veterinarios se enfocan en la salud y manejo de los animales, los ingenieros se encargan de proporcionar las herramientas e infraestructuras para que estos objetivos sean alcanzables.
Por ejemplo, un veterinario puede determinar las necesidades ambientales óptimas para una especie o etapa de producción, pero será el ingeniero quien diseñe los sistemas de climatización, ventilación o aislamiento necesarios para cumplir con esos requisitos. Cuando ambos profesionales trabajan en sinergia, los resultados se traducen en granjas más eficientes y sostenibles (Ortiz et al., 2021).
Como bien destaca Fernando Laguna en este artículo de opinión publicado en PorciNews, cada profesional en el sector porcino, desde el ingeniero hasta el veterinario, aporta un valor único que, combinado, garantiza el éxito de las granjas.